martes, 16 de febrero de 2010

"Paula, vos no sabés esperar". Me dijo mi sobrinito de 11 años, y enseguida reconocí que es verdad..
Yo tomo al tiempo, como algo que se lleva todo, y eso me hace cambiar de planes. Pero después, a los 10 días, me encuentro arrepentida por no saber esperar ni dejar que el tiempo decida, desconcertada por darme cuenta que las cosas no cambiaron, y mis objetivos tampoco, es más, se vieron totalmente destruídos por un capricho momentáneo. Por aburrirse, no saber esperar y querer algo nuevo, actuamos impulsivamente, y terminamos destruyendo todo, actuamos sin pensar, sólo por la intención de no aburrirnos y hacer algo nuevo que en verdad no nos satisface, destruye nuestros objetivos, es típico en mí.
Las cosas apuradas, salen mal, lo bueno tarda y yo no sé esperar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario