domingo, 20 de diciembre de 2009

En la vida siempre está el buen camino, así como está el malo..
Está dios, así como también está el diablo..
Creo que todos sabemos lo que verdaderamente está bien, y lo que no, sabemos cuales son las buenas opciones y también las malas.
Nadie está privado de saber que tiene que hacer las cosas bien, ni de cuales son aquellas cosas, acepto que algunas ideas pueden estar medio distorcionadas a la realidad de cada uno, pero pienso que las cosas escenciales las sabemos, y así como no estamos privados de saberlas, tampoco estamos privados de no elegirlas, punto en contra..
Siempre tenemos voces en la cabeza, o mejor dicho, pensamientos en forma de voces, que nos hacen actuar.
Siempre está la voz buena y la voz mala, una que nos hunde, y otra que nos ayuda.
Siempre está el:
"No te das cuenta que VOS no vas a poder".
-Ejemplo de la "voz mala", para tratar de tirar abajo tu objetivo y que no lo puedas lograr.-
En cambio, siempre está también el:
"Si quiero puedo".
Siempre va a estar la voz que te va a decir:
"Estás haciendo las cosas MAL."
Como también va a estar la otra alentandote para que hagas las cosas mal, que te va a decir:
"Para mí no está tan mal, si a mí me hace felíz".
A veces pensamos, -O mejor dicho, sin hablar en plural ni incluír a nadie que no estoy segura de su existencia-.
A veces PIENSO, que lo que siempre te dijeron que era malo, lo que para el mundo y la humanidad es malo, en verdad es lo mejor, y lo que siempre te dijeron que era lo bueno, no le ves sentido. Hasta el punto de llegar a pensar que te engañaron y lo bueno estaba escondido detras de lo peor, de lo que menos te imaginabas, etiquetado de manera contraria para que no lo puedas alcanzar.
Entonces, en realidad, la voz supuestamente buena, es mala, y te engaña para que no llegues a lo verdaderamente bueno, que es a lo que te hacen esquivar con la escusa de que es malo.. A veces pienso que es verdad, y a veces pienso que lo malo te engaña tanto, que se disfraza de bueno, te distorciona la realidad y te muestra la mierda de la manera más rica para que te guste y te hundas cada vez más, te ciega, te confunde. Son excusas para hacerte creer que lo que estás haciendo está bien, y sigas actuando mal, pero siempre en el fondo sabés cual es el camino.
(El problema es cuando, aún sabiendo que es malo, lo seguís eligiendo, mejor pensar que es bueno, no?..Para lo único que sirve pensar que está mal, es para quedarte tranquilo de que aún conservas un poco de sentido común, porque la culpa ya la perdiste.)


Mía.

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